El 17 de julio de 2025, el líder nacional del PAN, Jorge Romero, denunció que en 2023 varios políticos panistas, entre ellos Federico Döring, Santiago Taboada, Alessandra Rojo de la Vega, Lilly Téllez y Santiago Creel, fueron objeto de espionaje mediante geolocalización e intervención de comunicaciones en la Ciudad de México, presuntamente ordenado por el gobierno de Morena sin contar con una orden judicial.
También se reveló que el espionaje alcanzó a figuras de Morena como Higinio Martínez y Marcelo Ebrard, en investigaciones vinculadas a fiscalías de la capital y de Colima.
Aunque la Fiscalía de Colima reconoció la existencia del espionaje, la Fiscalía de la Ciudad de México, encabezada por Ernestina Godoy, lo negó.
El Poder Judicial determinó la ilegalidad de la obtención de dicha información y ordenó su destrucción.