Iglesia bajo ataque: los demócratas lanzan una guerra contra los cristianos.
El estado de Washington quiere obligar a los sacerdotes católicos a romper el sigilo de confesión, violando la libertad religiosa bajo el pretexto de “proteger a los niños”.
¿Próxima parada?
La excomunión o la cárcel.
Esta cruzada de la izquierda busca intimidar a quienes defienden su fe.
Lo que les sucede hoy a los católicos podría afectar mañana a todos los creyentes.
¡Despierta, América!